La Dirección de Transición Energética (DITE) liderada por Andrea Rocca, brindó un seminario sobre “Transición Energética en la industria del acero” del que participaron especialistas de varias empresas del Grupo Techint, y donde se plantearon oportunidades en relación a tecnologías disruptivas que aceleren la descarbonización.

Las industrias energéticas, de transporte y construcción emiten miles de millones de toneladas de dióxido de carbono al año. En el caso del acero, cemento y petroquímicas, que son sectores difíciles de disminuir (hard to abate) porque necesitan procesos a muy alta temperatura y volumen, contar con iniciativas de captura de carbono, utilización y almacenamiento (CCUS por sus siglas en inglés) es fundamental para acelerar su descarbonización.

El CCUS es una técnica segura y probada que previene que el dióxido de carbono sea liberado desde puntos físicos concretamente localizables, como una chimenea, o también lo remueve directamente de la atmósfera (DAC Direct Air Capture).

En el marco del compromiso de reducción de emisiones que asumieron empresas del Grupo Techint y del Día Mundial del Medio Ambiente, la Dirección de Transición Energética (DITE), liderada por Andrea Rocca, brindó un seminario del que participaron profesionales de todo el Grupo, con el objetivo de nivelar información técnica y enriquecer a los equipos de trabajo en materia de descarbonización.

Durante el evento, los disertantes compartieron su visión sobre cómo esta tecnología será una herramienta fundamental para el proceso de descarbonización hacia la neutralidad de emisiones antropogénicas.

Un fondo para acelerar la descarbonización

Por otro lado, Marco Tivelli, Chief Technology Officer de Tecpetrol, destacó que “es la primera vez que el Grupo Techint tiene un fondo de inversión” al referirse a TechEnergy Ventures, que cuenta con 150 millones de dólares para invertir en tecnologías disruptivas que aceleren la descarbonización, y en empresas que resuelvan problemas ambientales concretos. El fondo de inversión apunta a investigar e invertir en litio, energías renovables, hidrógeno, captura de carbono y la reducción de la huella de carbono de las acerías. TechEnergy Ventures analiza cientos de empresas, todas starts up de tecnología e innovación. En el caso de la captura de co2, los indicadores considerados son: eficiencia, consumo y costos de captura, siendo este último el principal impulso para la innovación.

Con respecto a la utilización del dióxido de carbono, existen alternativas interesantes . En este sentido, TechEnergy Ventures está investigando sobre potenciales productos que se podrían fabricar:

• Materiales de construcción (tipos de cemento, concreto, asfalto).
• Combustibles (metano, metanol).
• Químicos (ácido fórmico).
• Polímeros.
• Alimentación y farmacéutica.
• Materiales nuevos. Existe particular interés en ellos y se comenzará a dialogar con prestigiosas universidades al respecto.

Iniciativas disruptivas en Brasil

Durante el seminario Francisco Grosse, de Desarrollo de Negocios de Tecpetrol, explicó cómo es la construcción de un proyecto de carbón capture storage (CCS) y qué hay que tener en cuenta para armar un caso de negocios: punto de captura, marco regulatorio e incentivos, almacenamiento y transporte. Además, enfatizó que Brasil es una opción para el mediano/largo plazo ya que requerirá economía de escala (por los altos costos de transporte y almacenamiento), marco regulatorio competitivo y claro, e incentivos.

Por su parte, Josefina D’Hiriart, Geóloga de Reservorios de Tecpetrol, destacó la importancia del conocimiento del subsuelo para poder almacenar el carbono capturado y resaltó los criterios y requerimientos geológicos que hay que tener en cuenta para tener un complejo de almacenamiento. Además, detalló también cuáles son los tipos de reservorios para almacenar CO2, indicando los pros y contras de cada uno: yacimientos depletados, acuíferos salinos, y cavernas de sal; y recuperación terciaria de petróleo (EOR por sus siglas en inglés).

En consonancia, Malena Pizzul, del área de Planning de Tecpetrol, realizó un paneo acerca de los incentivos que funcionan en el mundo para desarrollar proyectos de CCS. Mientras Estados Unidos premia otorgando créditos fiscales por almacenar CO2, Europa y China tienen un sistema de comercio de emisiones. En el resto del mundo en general no hay una regulación específica. Puntualmente en Brasil al momento no hay incentivos concretos; existe una iniciativa para desarrollar un mercado de carbono y una propuesta de ley para regular de almacenamiento de CO2.

“A pesar de la falta de incentivos en América Latina, la transición va a suceder impulsada por las demandas de otros países y clientes. Es fundamental prepararnos”, destacó Andrea Rocca.

“Estamos tratando de hacer ecosistemas con universidades y miembros de la comunidad energética y tecnológica en los países donde operamos, a nivel investigación y desarrollo”, concluyó.