Team Leader de la gerencia PAD en la Cuenca Neuquina, la ingeniera de 30 años que coordina un equipo de hombres y mujeres, considera que las políticas de diversidad deberían –como las reglas de oro de seguridad– llegar a todos.   

Antes de graduarse como Ingeniera Química, en la región patagónica argentina, Agustina Martín (PAD Operation Team Leader) había descubierto su pasión por enseñar. Trabajó como docente e investigadora en la Universidad Nacional del Comahue, donde en equipo diseñó filtros con nanopartículas para el tratamiento de agua en la industria petrolera. “Participaba del consorcio entre la universidad y empresas para desarrollos específicos”, cuenta. 

Ingresó al área de planeamiento de Tecpetrol en 2017, en pleno desarrollo de Fortín de Piedra, y su crecimiento la llevó a su actual posición como Coordinadora de PAD, donde tiene la tarea de gestionar un equipo de siete jóvenes profesionales y la oportunidad de guiarlos en sus primeros pasos en la industria. “Soy apasionada de mi trabajo, y en esta Gerencia encontré una combinación entre lo que me atraía de la docencia y lo que me desafía en el desarrollo de nuevos perfiles en Tecpetrol”, agregó. 

La gerencia de PAD que coordinas fue creada a medida para Fortín de Piedra, ¿cuál fue su innovación y aporte en el crecimiento del yacimiento?  

La gerencia de PAD no existía en la Cuenca pero tampoco en la industria como concepto. Fue una creación de Tecpetrol para el desarrollo de Fortín y lo disruptivo es su carácter transversal, que involucra a varias gerencias operativas. El PAD es la unidad de medida a través de la que hacemos control de gestión, de tiempos, costos y performance, y esto está asociado a la incorporación del modelo industrial que Tecpetrol adopta de Tenaris. “Aunque la adaptación del know how de la fabricación de tubos a la construcción de PADs fue y es muy difícil, trajo muchos beneficios: en los últimos cinco años se ve el efecto de trabajar de una forma más estandarizada. Los resultados se ven en números y también en la cultura de trabajo, una sinergia que está en desarrollo porque esta visión por PAD implica que somos una red enlazada de sectores trabajando en conjunto.

¿En qué consiste tu trabajo hoy?

Desde hace dos años coordino a un equipo de ingenieros que hacen diagrama en campo. El trabajo con mi equipo consiste en guiarlos a través de las operaciones del ciclo PAD, perforación y fractura por ejemplo, y definir estrategias y metodologías de mejora continua y estandarización. Actualmente, estamos transitando un período de reestructuración y definición de nuevas responsabilidades, eso hace que mi trabajo esté compartido entre dos mundos: el campo y la oficina.

¿Cómo definirías tu estilo de liderazgo en el equipo?

Es una combinación de exigencias y aprendizajes laborales con el factor humano. Busco que nuestro equipo de trabajo funcione antes como un equipo de personas. Intento mantener lazos cercanos, que tengamos espacios para hablar de temas personales –tanto como cada uno quiera–, que sientan que hay un espacio de contención en este desafío de conectar la vida laboral con la personal y encontrar un equilibrio. En mi sector son todos jóvenes profesionales en sus primeros años de carrera, muchas veces es la puerta de ingreso a su vida laboral en esta industria, y a eso se suma que están siguiendo operaciones complejas en campo.

¿Podrías darnos un ejemplo?

Están viviendo 14 días alejados, con frío y calor. Pero también hablo de complejidad desde el punto de vista de riesgos operativos. La fase de construcción de pozos está entre las operaciones más riesgosas de la cadena de valor y además hay que cuidar la inversión: el seguimiento de los tiempos es clave para la operación. Implica mucha responsabilidad.

¿Cuál es el aporte de la tecnología en tu trabajo?

Sin dudas tener red de celular para comunicarse permanentemente con los chicos por WhatsApp acorta muchísimo las distancias, algo que a comienzos de 2018 no teníamos. Obvio la incorporación de Data Science y las nuevas plataformas de manejo de datos nos permite tener información histórica y analizarla para tomar mejores decisiones.

¿Cuáles son a tu criterio las acciones más destacadas de diversidad en Tecpetrol?

Todas las acciones del programa en conjunto son las que generan el efecto positivo. Lo más valioso de +diversidad es que se hable del tema, en distintos ambientes y que dejen de ser temas tabú o limitados a ciertos espacios. Que se difunda, que lleguen mails, que nuestros directores lo impulsen es clave. Todavía hay un desafío en llevar más acciones al campo, llevar esas líneas de trabajo a los ámbitos operativos. El mayor valor que aporta es que se reconozca a las minorías –no solamente mujeres sino todas las minorías– porque es clave para el desempeño de los que formamos parte de esas minorías.

¿Y cómo es tu experiencia como ingeniera en el campo?

A las mujeres en el campo en general nos toca una dinámica de mucho respeto, incluso en locaciones en que a veces trabajamos con 40 hombres de distintas empresas y distintas responsabilidades. El trato te diría es igualitario, y eso es una muy buena señal de cómo estamos evolucionando primero como sociedad y sobre todo como empresa. Que Tecpetrol no permita desvíos a nuestros lineamientos de +diversidad hace que nuestros contratistas también adquieran los mismos valores. En mi sector de 40 personas sólo tres son de Tecpetrol. Más allá de cómo decanta el programa +diversidad a la interna, me interesa lograr que nuestros contratistas adquieran y persigan los mismos valores. Como sucede en Seguridad tenemos que hacerlo en materia de diversidad. Entenderlo como una cultura. Y así como definimos nuestras reglas de oro, tenemos el mismo desafío en diversidad.