Desentrañando laberintos junto a PROA
En el marco de la exhibición “Laberintos” recientemente inaugurada el 3 de septiembre y con el auspicio de Tenaris-Ternium-Tecpetrol, el departamento de Educación de Fundación Proa ofrece 3 clases a distancia vía zoom gratuitas y un seminario online de 4 clases “El cine como laberinto”.
Los laberintos son espacios reales e imaginarios, recintos que presentan encrucijadas y dilemas mentales, así como espacios donde “encerrar” nuestros monstruos mitológicos y literarios desde la antigüedad. En línea con este concepto, el sábado 3 de septiembre, Proa inauguró la exhibición “Laberintos” que expone ejemplos de la historia, la literatura, el cine y las artes plásticas realizando un recorrido por sus salas organizadas en cuatro núcleos temáticos.
De acuerdo a Adriana Rosemberg, presidente de la Fundación PROA en Buenos Aires, “esta idea nació hace unos meses al reflexionar sobre la compleja problemática actual, tanto a nivel nacional como internacional. Siempre hemos considerado que las instituciones culturales deben estar en consonancia con los acontecimientos.”
Respondiendo a la pregunta ¿cómo se relaciona el laberinto con nuestra realidad?, la especialista en arte explica que “vivimos en un tiempo de perplejidad y en todo momento nos preguntamos qué sucederá en el futuro próximo. Estamos sumergidos en un mundo de imágenes y noticias complejas, en el que la cotidianeidad se torna muy inestable y en el que, de alguna manera, no vemos la salida. La historia nos demuestra que esto ya ha sucedido en el pasado y tratamos de buscar cómo nombrar esta percepción colectiva de gran inquietud. Surgió así el concepto de “laberinto” como una palabra que reúne una sensación, una emoción, un lugar”, agrega Rosenberg.
Los laberintos se suelen clasificar según dos grupos, por un lado, el más simple o clásico es el laberinto “univiario”, que posee un solo corredor o pasillo que, una vez comprendido su desarrollo, hace fácil la salida. Por otro lado, los laberintos “multiviarios” o laberintos de caminos alternativos, en donde para llegar al centro se pueden recorrer varios senderos correctos o incorrectos para conseguir la salida buscada.
Si ponemos foco en su objetivo, además de otros múltiples usos, el laberinto no es más que un simple juego de la razón que desafía nuestra capacidad deductiva. El juego se encuentra en nuestra posibilidad de conexión, de establecimientos de similitudes.
En este contexto, PROA también ha organizado – como contribución de su departamento de educación - 3 clases a distancia vía zoom, totalmente gratuitas y un seminario de 4 clases bajo el título: “El cine como laberinto” el cual conlleva un arancel. (Para más información, clic aquí).
La primera clase virtual, se dictará el miércoles 21 de septiembre a las 17:00 hs, bajo el título “Laberinto y la ciudad: Cartografías”, en línea con la propuesta curatorial de la exhibición “Laberintos”, PROA propone un recorrido a través de las representaciones de una ciudad laberinto. “Partiendo desde la representación de la ciudad amurallada de Jericó, en una yuxtaposición de tiempos, hasta la ciudad contemporánea representada con su intrincada cartografía y velocidad. La visión en plano nos permitirá seguir las líneas propuestas por los artistas para perdernos y encontrarnos con la ciudad.”
Durante esta jornada se tratará en conjunto el diálogo que los artistas proponen desde distintas técnicas y miradas que permiten repensar las representaciones del espacio, desde los códices medievales hasta obras de artistas contemporáneos como León Ferrari y Pablo Siquier.
La segunda jornada se dictará el miércoles 5 de octubre, a las 17:00 hs, bajo el nombre “La ciudad como paradoja: laberintos y escaleras”. Un curso donde se propone abordar diversas representaciones de artistas que han problematizado la cuestión espacial a través del trabajo sobre los juegos de la perspectiva, las trampas y paradojas visuales. Durante esta jornada, se analizarán las relaciones entre las obras del italiano Giovanni Battista Piranesi (1720-1778), Maurits Cornelis Escher (1898-1972) y la artista brasilera contemporánea Regina Silveira. Los emblemáticos grabados de Piranesi generan espacios para cárceles imaginarias de arquitecturas imposibles; en las obras de Escher y Silveira, el trabajo sobre la perspectiva, la desestabilización espacial y las distorsiones perceptivas generan espacios paradojales que, al mejor modo barroco, desafían las certezas del espectador.
La tercera jornada tomará lugar el miércoles 19 de octubre, a las 17:00 horas. Llevará el nombre “Laberintos en el Cine” y durante su desarrollo se analizará cómo ha abordado el cine el “topos” (lugares comunes) del laberinto y qué posibilidad habilita la imagen cinematográfica -imagen, tiempo, movimiento- y su lenguaje a la resignificación de esta figura. En ocasiones el laberinto es el espacio –real o imaginario- de la fantasía necesario para la evasión y la aventura infantil; cuando no se encuentra dentro de él como en el mito clásico, el laberinto es un espacio de refugio frente a la amenaza del monstruo, pero también es el espacio subterráneo ligado al peligro adjudicado a lo femenino.
En tanto, el seminario online “El Cine como laberinto” (arancelado) se compone de cuatro clases a cargo de los especialistas Ricardo Parodi, Anabella Speziale y Fernando Martín Peña. El programa invita a estudiar y analizar la presencia conceptual, simbólica, semántica y visual del tópico del “laberinto” a partir de una selección de películas locales e internacionales. Las cuatro clases se dictarán a lo largo de 4 semanas (miércoles 28 de septiembre; Ricardo Parodi; miércoles 5 de octubre, Ricardo Parodi; jueves 13 de octubre, Fernando Martín Peña y jueves 20 de octubre, Anabella Speziale). Cada encuentro tiene una duración de dos horas y se realizan vía plataforma Zoom.