La TUIC se fue a Vaca Muerta
Por primera vez, la clásica TUIC visitó Fortín de Piedra. Te contamos por qué la segunda edición 2023 del Programa de Inducción para Jóvenes Profesionales fue tan especial.
TUIC. Tecpetrol University Induction Camp. Un acrónimo que es mucho más que eso. Es un símbolo y un hito en la vida de nuestros Jóvenes Profesionales (JP): el entrenamiento intensivo sobre la industria que fortalece de conocimientos esta particular etapa laboral.
Acaba de terminar la segunda edición 2023 del tradicional programa. La noticia sobresaliente es que lo hizo con un estreno de peso: por primera vez, el proyecto Fortín de Piedra, en Vaca Muerta, se sumó al yacimiento escuela de Tecpetrol, El Tordillo. En esta crónica te vamos a contar detalles de este nuevo formato.
“Era el paso que faltaba”, razona Joaquín Naveiro, Training & Development Analyst: “Los JP tenían que conocer y trabajar en Fortín: consideramos fundamental tener la visión global de ambas operaciones. Sumándolo a El Tordillo, esta edición de la TUIC se organizó para que conocieran bien las diferencias entre Convencional y No Convencional, además de las magnitudes entre el proyecto de Chubut y el de Neuquén”.
Maira Soto, Operational Planning Jr. Engineer en Neuquén, tiene buenas sensaciones: “Siento que era necesario agregar Fortín a la TUIC. Son dos mundos distintos. Por un lado tenés un campo súper desarrollado y por el otro uno en pleno crecimiento. En Fortín trabaja mucha gente, hay equipos de perforación, coiled, fractura: vas desde la escala del workover y el pulling al desarrollo pleno. Ahí pudimos ver, además, la parte de calidad, una gerencia nueva”.
Arianna Gili, Operational Planning Jr Engineer, concuerda con su compañera: “Haber estado en Fortín y hacer el simulador fue tener dimensión de la estructura y los materiales que se usan, igual que visitar un PAD y ver esos procedimientos en campo. Son magnitudes distintas a El Tordillo. Creo que ir a Fortín termina de cerrar el círculo de aprendizaje”.
“Me encantó la TUIC, conocí personas increíbles de distintas partes de Argentina y de Ecuador. A muchos de ellos ya los considero mis amigos y creo que los recuerdos que nos llevamos nos van a acompañar siempre”, comienza Santiago Roldán, Financial Planning Analyst en Buenos Aires, “Las últimas dos semanas vimos en persona lo que habíamos estudiado semanas atrás. Considero que fue fundamental para poder terminar de entender no solamente la parte teórica sino también la práctica. Me impresionó el espíritu familiar que se respira en El Tordillo. Y me impactó el nivel de innovación de Fortín de Piedra. Pude ver lo que tanto nos habían estado contando sobre la industrialización de los procesos en un campo no convencional. A nivel logístico e industrial es el proyecto más grande que he visto hasta ahora, fue algo impresionante”.
“Esta edición fue un desafío por varias razones. Primero, porque fue la que tuvo más participantes. También porque fuimos a Sede, a Comodoro Rivadavia y a Neuquén. Dormimos en el campamento de Fortín, ninguno de los TUICers lo había hecho. Fue una doble escuela, con dos simuladores en las locaciones. Salió todo muy bien, es muy gratificante ver cómo los Jóvenes Profesionales aprenden: se ve cómo crecen del día 1 hasta el último, no solo a nivel profesional sino como personas y como grupo. Es muy notorio el cambio. Y eso es lo más emocionante”, cierra Joaquín y la conclusión es lógica: Fortín de Piedra ya es una parte importante de la TUIC.