Desde el Real Time Operation Center de Buenos Aires, Tecpetrol probó el manejo remoto del set de fractura. Nos lo explica una de sus impulsoras.

Un vistazo a los procedimientos que se vienen. En el Real Time Operation Center (RTOC), la sala de control ubicada en Sede, Buenos Aires, Tecpetrol está haciendo pruebas remotas de manejo y modificación de parámetros en un equipo de fractura de la empresa SLB en Cerro Las Niñas, Los Toldos I Norte, Vaca Muerta. Cultura Tecpetrol, innovación y avance tecnológico en su estado más puro.

Es el principio. Los ojos de la industria están puestos en estos ensayos inéditos, pioneros en pozos no convencionales. A la que no tomó de sorpresa fue a Lucrecia Gava, RTOC Project Specialist. Ella y su equipo llevan tres años montando la sala, que en su nacimiento centralizó las operaciones de perforación y completación y que está comenzando a evolucionar a su siguiente forma.

“Visualizamos un futuro donde las acciones operativas se comanden remotamente, tanto en Completación como en Perforación. Este ensayo lo realizamos en el marco de fractura hidráulica en Vaca Muerta. Conceptualmente montamos el van en Sede y de ahí se comandaron los equipos del set de fractura. Fue una prueba de factibilidad en la que medimos los tiempos de todos los procesos, desde un simple clic en Sede que se materializa en un cambio de parámetro en la operación”, dice Lucrecia.

¿Cuáles fueron esos procesos? Calibración de densitómetro, cambio de stage de arena, modificación de caudal de bombas y algunas más: “Controlamos la operación. Los tests dieron bien, las respuestas y los parámetros fueron satisfactorios. Logramos hacer con éxito pruebas tanto de cambio de concentración como de cambio de caudal y manejo a distancia de los equipos de fractura. SLB posee la tecnología para duplicar las pantallas del van de fractura y llevamos las pruebas en equipo”.

Fueron complejos y planeados, pero aún así fueron los primeros pasos de un largo camino: llegar a la sala como centro neurálgico requiere trabajo en equipo, coordinación y medidas para que no se afecte la operación, ni se ponga en riesgo la seguridad, mientras se hace la cantidad necesaria de pruebas.

“Más allá del ensayo en sí, que fue excelente, estamos muy conformes con el tiempo de reacción. Eso nos muestra que es muy factible a futuro la posibilidad de tomar control y enviar señales remotamente a los equipos de perforación y los sets de fractura. El objetivo es que cada vez podamos tener operaciones de mayor calidad y con mayor seguridad: si bien hay muchas tareas que no se dejarán de hacer en campo, nuestra sala pasó en enero de monitorear a tener responsabilidad directa de las operaciones. El próximo paso será poder también realizar los cambios requeridos desde Buenos Aires”.

Hablamos de un futuro en el que las operaciones no solo estén optimizadas, sino que serán monitoreadas y se podrá tomar acción a la distancia. “La migración hacia un esquema operativo completamente remoto en estimulación no convencional, junto con la reubicación de ingenieros de estimulación señala un cambio de paradigma en las dinámicas de toma de decisiones”, concluye, mirando al futuro, Lucrecia.