Criptoenergía: Minado en Vaca Muerta
En algunos pozos de la Cuenca Neuquina, Tecpetrol está mitigando digitalmente el venteo. Esa es una noticia. La otra, que el desarrollo se llevó a cabo en tiempo récord.
El segundo y más grande proyecto de mitigación digital de venteo realizado en Argentina ya está en marcha en los Toldos II Este, en plena Cuenca Neuquina. Hablamos con Emiliano Katcoff, Facilities Engineer, y Franco Ciucci, Well Services Expert: Franco fue el Project Leader transversal del proyecto y Emiliano, el Project Leader de la obra. ¿Los temas de la charla? Eficiencia energética y velocidad para hacerla realidad.
El escenario lo delimita Franco: “El proyecto se desarrolla en un yacimiento de petróleo en fase appraisal, es decir la fase temprana de explotación, con bajo nivel de infraestructura y limitaciones para evacuar la producción”. Para poder hacerlo se abrían tres alternativas: la primera era restringir los pozos hasta tener mayor capacidad de evacuación. La segunda, montar una planta de licuefacción. La tercera, y más innovadora, armar un sistema de mitigación digital de venteo.
Eligieron la tercera. “Ese gas que no podemos ni evacuar ni quemar lo destinamos como combustible para moto-generadores que alimentan computadoras para minado de criptomonedas”, explica Emiliano. Los Toldos II Este, ubicado al norte de Vaca Muerta, está aún en fase temprana: era el escenario ideal para esta innovación. ¿Los resultados? Aumentó la producción, se redujo la emisión de dióxido de carbono equivalente y se logró un uso más eficiente de la energía al darle valor a un producto que por el contexto se venía considerando un desecho.
La instalación consta de un sistema de separación primaria, un skid de regulación y acondicionamiento de gas, ocho moto-generadores, doce centros de cómputo y más de tres mil computadoras. La iniciativa, que se llevó a cabo junto a la empresa Unblock, abre un horizonte para otros desarrollos no convencionales de petróleo porque ofrece una solución atractiva para los yacimientos nuevos, ya que no requiere tanta infraestructura.
“Este proyecto sienta un precedente”, se enorgullece Franco. “En etapa de appraisal no hay muchas opciones para producir el hidrocarburo, y esta se convirtió en una solución viable, que además contribuye al medio ambiente”.
Fue, como de costumbre, un desafío grande: requirió el trabajo de más de diez áreas de Tecpetrol, de la empresa Unblock y cinco contratistas, además de mucha planificación y seguimiento. Conseguir los materiales y equipos también fue tarea ardua porque se importó en una coyuntura compleja.
“Al ser un desarrollo pionero, hubo empresas nuevas trabajando con nosotros. Eso supuso un reto adicional en temas de calidad y seguridad. Pero todo se ejecutó en tiempo y forma”, agrega Emiliano. “Pudimos ejecutar el proyecto sin desvíos económicos y financieros y los ejecutamos sin eventos SAS (Seguridad, Ambiente y Salud)”.
Franco suma: “A veces pensamos que la velocidad es enemiga de la calidad. Pero en este caso no fue así y esto se pudo hacer gracias al alto nivel de compromiso de los participantes”. Ambos saben que un proyecto así, hecho casi desde cero, iba a necesitar energía extra porque avanzar en terreno desconocido necesita impulso pionero: “Nos fuimos empujando entre nosotros. Todo el tiempo buscamos generar sinergia para que se pudiera dar. Y acá estamos. Misión cumplida”.
El proyecto en números
> 5 pozos, 2 Pads interconectados.
> 1 separador trifásico.
> 1 skid de gas combustible.
> 8 moto-generadores de 1.4MW c/u.
> 12 MDCs (Centros Modulares de Cómputo).
> +3000 computadoras.